Si eres fumador lo mejor que puedes hacer por tu salud es dejar el hábito. Tanto tu salud bucal como la general mejorarán y dentro de 10 años, reducirás el riesgo de cáncer bucal en un 50%. Cuanto más tiempo pases sin fumar ni consumir tabaco, menor será el riesgo de contraer cáncer.
Si bien dejar de fumar no es una tarea fácil, es posible tener éxito si te rodeas de los recursos adecuados. Asistir a grupos de apoyo, reemplazar los cigarrillos con suplementos de nicotina y fijarse metas diarias pequeñas y alcanzables y visitar a profesionales te ayudará a dejar el hábito.
El cepillado regular, el uso de hilo dental y las revisiones con tu dentista te ayudarán a mejorar tu salud bucal en general y te permitirán volver a tener una boca sana. Tus encías mejorarán lentamente y se volverán más saludables, el aliento se volverá más fresco y podrás revertir las manchas de tus dientes mientras reduces la posibilidad de pérdida de dientes.
Ahora que conoces el impacto del consumo de tabaco en tu salud bucal, puedes comenzar a realizar mejoras en tu rutina de higiene diario y recuperar la salud de tu boca.